Me llamo Eugenia De Micheli, nací un 14 de febrero en pleno Carnaval porteño. En ese 1983 las murgas (y todos) volvían a salir. Será por eso que soy tan callejera. De chica, todo el tiempo quería estar afuera: correr y saltar hasta tocar las hojas de los árboles. Y en casa, leía, que es otra manera de estar afuera. Toda mi familia es inmigrante: rusos, ucranianos, italianos y españoles. Será por eso que me gusta viajar, conocer lugares y recopilar historias, maneras de hablar, palabras nuevas. Tengo una memoria "mamotrética", un monstruo bueno que me acompaña y no me deja olvidar nada: ni un solo amor, ni un verano, ni un mísero numerito de teléfono. Será por eso que escribo historias, para compartir mi memoria. Me siento como una de esas muñequitas que se meten adentro de otras más grandes: crezco, pero sigo siendo igual a la primera.
Del Naranjo te invita a recorrer y compartir el camino de lo posible y lo imposible, la fantasía, la imaginación.
Estamos en las librerías, bibliotecas, escuelas y ferias de todo el país.
Leer es una aventura y queremos acompañarte en este viaje.